domingo, 13 de marzo de 2011

La resurreccion (parte II)

Yo primero -dijo Coraje- tendras que pelear conmigo, me pondré de tu tamaño para que sea una batalla justa. –despues de haber dicho esto, el se redujo a una estatura de 2 metros- asi esta mejor.
Jen se quito la espada de la espalda, y el corrió hacia contra coraje, el guerrero volo y Jen trato de hacer lo mismo, pero no pudo, se sorprendió.
¿Por que no puedo volar?- se dijo Jen
Por que en este mundo no se pueden utilizar los espíritus- respondió Coraje
¿Y como es que tu me leistes la mente?- pregunto Jen
¿Ah no te lo había dicho?, bueno yo tengo como poder el leer la mente- dijo Coraje
Esta bien- dijo Jen suspirando muy profundo.
Este salto contra Coraje, le quiso pegar con la espada pero este desapareció, ya que estaba en su mundo y podía hacer todo lo que el quería. Jen volvió a tocar el piso, al caer coloco una mano en el piso para no darse contra el.
Coraje apareció detrás de el, este alzo su mano y le dio en la nuca a Jen, este cae tumbado en el piso, hace un movimiento de ciento ochenta grados, en el sentido de las agujas de reloj, y se levanta quedando de frente a Coraje, le dio un golpe en la boca del estomago y Coraje cayo tendido en el suelo.
Te gane- dijo Jen
No creas eso todavía- respondió coraje. Este se levanto del piso, se coloco en un postura erecta y su color era azul, se fue cambiando poco a poco a un rojo vivo.
Ahora, veras mi verdadera forma- grito coraje. A el le salieron a las en forma de murciélago, pero estas eran de un color rojo, el cuello se le estiro y le salió una gran cola, le salieron garras, los pies y las manos se convirtieron en patas, a su cuerpo le salían escamas, un hocico y este se volvía mas grande, le salieron llamas en las alas, en la cola y en la espalda. Coraje se había convertido en un dragón, pero uno de fuego
Esta es mi forma natural, soy conocido como el hijo del espíritu Nugo, a mi me llaman el Dragón de la Muerte. Ahora lucharemos en mi mundo favorito- dijo Coraje, y al terminar Jen y el aparecieron en un lugar llenas de montañas, que sobrepasaban las nubes, Jen se acerco al borde de la montaña, se asomo y vio que era un vacio, si caia moría de una vez. Y lo único que Jen tenia para pelear era la espada.
Coraje voló lo mas alto que pudo, desapareciendo de la vista de Jen, este se preocupo ya que no sabia donde estaba el dragón, Jen se separo del borde, agarro la espada y se coloco en posición de defensa, empezó a sudar frio, no sabia que hacer, le pasaban mil cosas por la cabeza, se encontraba distraído, pensaba en como derrotar a Coraje. De repente una silueta negra se apareció por el aire, Jen se asusto, coloco la espada por encima de su cabeza, la silueta desapareció, por atrás de el venia una gran bola de fuego, Jen sintió el fuego de la bola y salto, miro hacia abajo y vio la bola, recogió los pies para que no se les quemaran, dio un medio giro, extendió su brazo, en el cual estaba la espada, pensó en Sam, y lo que haría si estuviera vivo, después de esto la espada brillo de un color azul muy claro, al terminar de dar el medio giro, Jen coloco mas presión en el brazo donde tenia la espada, ella lanzo una ráfaga de viento tumbando a Coraje.
Así, si esta mejor- dijo Jen mirando la espada.
Demonios, ya aprendió a utilizar la espada, tengo que actuar rápido- dijo Coraje. Este volvió a subir, pero no tan alto como la otra vez, alzo la cabeza, coloco su hocico hacia arriba y lo abrió. Encima del hocico había se estaba creando una esfera de fuego, esta tenia al redor unas chispas de electricidad. Se veía, como la esfera alzaba todo lo que era materia y la volvía fuego, con eso ella crecía cada vez más.
Jen miro la espada y esta tomo un color rojizo, Jen sonrió y salto lo mas alto que pudo, llegando al estomago de Coraje, este alzo la espada, la sostuvo con las dos manos y la coloco boca abajo, luego se la clavo en el pecho a Coraje.
El dragon abrió los ojos, le salió sangre por el hocico, Jen le quito la espada del pecho, dio un giro y le dio una patada en la herida, expulsando al dragón lo mas lejos posible. Pero Jen no tuvo en cuenta la esfera de fuego que Coraje había hecho, eso estaba por encima de el, empezó a descender. Jen miro hacia arriba y la esfera iba muy rápido como para detenerla y Jen no podía salir volando de hay. Alzo el brazo izquierdo –por favor funciona, funciona- grito Jen. Y de ese brazo salió un escudo, Jen lo utilizo para protegerse del fuego. Jen sentía el calor de la esfera de fuego, pero no podía hacer nada solo tenia que esperar a que se disipara. Estaba cayendo demasiado rápido, al tocar el suelo, Jen ejerce fuerza para tratar de ganarle a la esfera, pero esta no se disipaba. Miro al lado de la esfera, y mas abajo en otra montaña estaba Coraje que se levantaba del suelo, aun tenia la herida abierta y no se veía que tuviera la misma fuerza, Jen miro la esfera, hiso un ultimo intento, agarro la espada con toda su fuerza, esta se torno de un color marrón, otorgándole mas fuerza a Jen, este movió su brazo izquierdo, con suficiente energía para expulsar la esfera hacia donde estaba Coraje.
El dragón trato de escapar de ese lugar, pero no se pudo mover y la esfera impacto contra la montaña, destruyéndola totalmente. Jen se encontraba muy cansado, este cayo arrodillado, cuando toco el piso con las manos volvió al mismo lugar en donde se encontraba, con los tres Guardianes.
Yo te había matado- Grito Jen señalando ha Coraje
Si, si lo hiciste, pero destruiste mi parte diabólica, ahora gracias a ti, soy un Guardián libre- dijo Coraje con una sonrisa   
¿Qué?- pregunto Jen
Si, nosotros estamos encadenados a este mundo, si tu llegas a romper nuestras cadenas te damos una oportunidad para que saques a alguien de la muerte- Respondió Valentía
Esta bien, lo entiendo- Dijo Jen
Ahora es mi turno- dijo Amor- Pelearemos en mi mundo favorito

Al decir esto, aparecieron en un cuarto, muy grande, como de unos quince kilometros cuadrados, este estaba compuesto por varios espejos y cornetas, Jen no sabia donde estaba, miraba su reflejo en los espejos, y veia una sombra detras de el unas que otras veces.

Bienvenido a mi mundo- Dijo Amor, su voz provenia de todos lados

¿Donde estas?- pregunto Jen

Justamente de tras de ti- respondio Amor, y su voz provenia detras de Jen, el se giro para verla, pero no estaba ahy. Jen se empeso a asustar, escuchaba la risa de Amor por todos lados, empeso a correr, y seguia escuchando la risa, cada espejo que se le crusaba en el camino el lo cortaba con la espada. Estaba cansado, vio a Amor, el fue conriendo y le pego con la espada, pero era un espejo, luego la volvio a ver a su izquierda, Jen fue corriendo a darle y tam bien era un espejo... 

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