domingo, 29 de mayo de 2011

El final

La abrazo y la beso en la mejilla, salió del campo y se dirigió a la entrada del castillo, miro a todos los aldeanos, estos volvieron a tratar de asesinarlo, pero este saco las botas del trueno y todos quedaron sorprendidos, su nuevo rey era el… el se las coloco e hiso que estas se unieran a su cuerpo, camino y se fue de esa ciudad, justo antes de salir se encontró con un anciano, el viejo saco un bastón, este brillaba, Jen creyó que el viejo iba a luchar, lo cual fue así, alrededor del viejo salió un aro, de varios colores, yo cerré los ojos y pensé en Gugo, una armadura de piedra apareció en mi cuerpo, el viejo alzo el bastón y junto con este una llamarada de fuego, que iba dirigido hacia el, este saco una pared de agua de la nada para evitar el ataque, cuando el agua se disipo por el calor Jen ya había desaparecido y apareció detrás del viejo, con un movimiento rápido extendió su pierna y trato de pegarle, pero lo atravesó, el anciano se volvió viento, Jen se preocupo, con las habilidades de este.

¿Quién eres?- le pregunto Jen
Bueno… soy el que encerró a los espíritus en las partes de la armadura.- dijo el anciano con una sonrisa

¿Cómo es posible que aun sigas vivo?- le volvió a preguntar Jen

Es que yo soy un ser inmortal- le respondió el viejo

Eso lo veremos dijo Jen, en el momento en el que su brazo se incendiaba, desapareció y apareció detrás del viejo nuevamente, extendió su mano y de este salió una fuerte llamarada, luego volvió a desaparecer debajo de este (la llamarada aun no había alcanzado al viejo), un movimiento de tierra hiso que el anciano perdiera el equilibrio, Jen le aprovecho y atrapo a al anciano con unas barras de tierra, la llamarada le pego en el pecho, pero este se recuperaba rápidamente. Jen volvió a contraatacar, pero el anciano fue mas rápido, se agacho y con una patada lo paro en el aire, con otro movimiento de la pierna lo lanzo contra la tierra, cuando cayo, el anciano se acerco, coloco su pie sobre el cuello de Jen.
Bueno déjame decirte que yo… soy tu ancestro, digamos que soy tu abuelo muy viejo- le dijo el anciano- mi nombre es Jensser.

¿Qué?- dijo Jen con la respiración entre cortada por la presión que ejercía el pie sobre el cuello de este.

Lo que escuchaste, y por eso tengo la necesidad de matarte, por que no voy a dejar que allá otra persona como yo, por que es uno el que salvara al mundo de los espíritus- volvió a decir el anciano.

Bueno déjame decirte “abuelo”, que yo tendré que acecinarte, por que los espíritus me aceptaron a mi y no a 
ti- al terminar de decir esto Jen dio un salto y con ambos pies le dio en el pecho  a Jensser, este callo en el piso y Jen saco dos alas, una armadura de tierra, saco otras dos alas pero de fuego, unos guantes de luz (ósea de trueno), y un casco de agua. -déjame decirte que yo soy el ser completo y tu eres solo un microbio debajo de mi- le dijo Jen mientras lo miraba a los ojos, Jen desapareció mucho mas rápido que antes, cuando apareció volvió a desaparecer, y así hiso varias veces, Jensser quedo mareado, e hiso una muralla de tierra, Jen apareció en los mas alto del cielo, solo se veían sus alas de fuego y sus guantes, ya que era lo único que brillaba en esa oscura noche, el anciano lo vio y lanzo un rayo, lo cual no fue un obstáculo para Jen que lo deshizo con un movimiento de su mano.

Muere viejo- le dijo Jen, mientras tomaba impulso y clavaba su mano en el pecho del anciano, el anciano vio a su izquierda y miro como una joven muchacha corría hasta allá, el anciano extendió su basto y lanzo un rayo, lo cual le pego en el pecho a la muchacha, esta callo templada al piso, Jen miro a la joven y observo que fue Laube a la que le había pegado, este se enfureció y sus ojos tomaron un color rojo, sus alas blancas se volvieron rojas, su armadura se deshizo por el intenso calor, Jen levanto su brazo y volvió a pegarle al anciano con toda la fuerza que los 5 espíritus le podían dar, un cráter se formo alrededor de este, los arboles se inclinaron por la presión del golpe, las lagrimas de Jen se evaporaban, trato de tranquilizarse pero no pudo, desato su furia contra el pueblo, las casas se incendiaban, los niños corrían pero Jen los alcanzaban con los rayos, se creaban terremotos, lo cual destruyo el templo, luego de una larga noche este se tranquilizo, y fue a buscar a Laube, la cual se encontraba en el mismo lugar y la misma posición, Jen se acerco y coloco sus manos alrededor de su cabeza, la beso y sus lagrimas caían sobre el rostro de ella, el se levanto, hiso un movimiento de sus pies y enterró a Laube en una tumba de tierra, en el centro de la ciudad, luego hiso lapida que decía “Aquí descansa en paz la reina de la ciudad del trueno y del todo mundo, Laube Gonu, 1853-1868”, dejo una flor y se retiro.

Varios años después Jen poseía una capa negra, su pelo había crecido muy exageradamente, su rostro manifestaba una expresión de odio al mundo, y todos lo conocían como el poseedor de los 5 ELEMENTOS.




FIN…

        
    

jueves, 26 de mayo de 2011

El rey del trueno (parte II)

Jen trato de levantarse pero no pudo, se comenzaba a dar por vencido, cerro los ojos y cuando los abrió los tenia vuelto en llamas, coloco ambas manos debajo de la planta del pie de Leónidas, aplico fuerzas y levanto la pierna, tiro con toda su fuerza a Leónidas lejos de hay, Jen se levanto y voló hasta Leónidas, apareció en frente de el y extendió su brazo por detrás de su cabeza, luego abalanza su puño cerrado contra el rostro de este, Leónidas comienza a sangrar, se ríe y se levanta, una gota de sangre corría por su comisura de la boca, este saco la lengua y se la limpio, miro a Jen y luego apareció detrás de el.

Quiero que me mates- dijo Leónidas en el oído a Jen, este se voltea y le pega con el codo en el rostro, Leónidas desaparece de hay, Jen se vuelve cenizas, y también desaparece, un polvo negro se acumula en el aire y se va generando una figura, luego aparece Jen, con la espada en la mano derecha. El mira para todos los lados, ve a Laube y sonrío, pero Laube muestra un gesto lloroso, Jen siente un calor terrible un punto de la espalda, el se voltea y ve a Leónidas, con su mano derecha dentro del cuerpo de Jen, este queda asombrado y pierde el equilibrio y comienza a caer, este comienza a sentir algo raro en su cuerpo, observo que las piezas se unían a el, y comenzó a calcular el tiempo y solo llevaba 10 minutos de batalla, no tenían por que unirse. El tiempo se para, nada se mueve, solo Jen y los cuatro espíritus que tiene de frente.

Te daremos de nuestro poder, pero tienes que dejar que nuestros espíritus se unan con el tuyo- dijo Ango   

¿Y que me pasara?; y ¿como podre pelear junto a ustedes?- le pregunto Jen

Bueno para invocarnos solo tiene que cerrar los ojos y pensar en cualquiera de nosotros, y te saldrán las alas; llamas de las manos; agua por alrededor; tierra debajo de los pies y si tuvieras trueno este se generaría a tu alrededor.- dijo el espíritu

Entonces quiero que se unan a mi, quiero vencer a Leónidas- dijo Jen desafiándolos

Esta bien- respondieron los espíritus al mismo tiempo, Jen cerro los ojos y todos los espíritus se unieron a el, el sentía como su fuerza aumentaba, sentía que era capaz de todo. El abrió los ojos y el tiempo volvió a transcurrir, Jen vio que todas la piezas de la armadura desaparecieron, el cerro los ojos y pensó en Isgo, cuando los volvió a abrir tenia dos alas, pero estas no eran materializadas, eran espirituales, Jen las movió y voló, Leónidas quedo sorprendido por lo que paso, así que decidió atacar con lo que tenia, se volvió un dragón, o mejor dicho, se transformo en Mogo, el ataco y Jen se rio, se volteo y genero una llamarada contra Mogo, lo cual le pego en un ala, este callo y Jen le callo encima, alzo su puño y en este se agruparon puras piedras filosas, luego las introdujo en el pecho de mogo.

Mogo comenzó a desaparecer, Jen sonrío satisfecho, se levanto y vio que no estaba Leónidas, el se sorprendió, miro para todos lados y sintió un fuerte golpe en su mejilla derecha, este comenzó a rodar por el suelo, se levanto y coloco en “4”, unas llamas comenzaban a salir del suelo, luego las llamas salían de su espalda, luego de todo su cuerpo, se levanto y se acerco a Leónidas, coloco su mano, envuelta en llamas sobre el pecho de el.

Te matare y luego te quitare tu poder- le dijo que una voz un poco escalofriante, al terminar de decirlo una fuerte llama salió de la mano de Jen, y expulso a Leónidas lejos de el, se acerco de nuevo a el y con el viento hizo que le salieran heridas en la cara, luego con la tierra lo atrapo de manos y pies, Leónidas ya no poseía la fuerza para poder seguir peleando, Jen se acerca y saca la espada, esta se prende en fuego, le coloca la punta de la espada en el mentón, luego con toda la fuerza posible le atraviesa la cara de abajo hacia arriba… Jen se retiro y tomo los pies, se fue y miro ha Laube…